viernes, 23 de enero de 2009

La falsedad del mundo


El mundo no es más que…
un compendio de mentiras,
de absurdas e inconexas falsedades,
donde unas con otras logran tejer
esa red invisible donde acabamos atrapados,
como dulces mariposas.
No quiero vivir dentro
de esta vorágine de egoísmos,
traiciones y desengaños,
soy demasiado débil
para poder defenderme sola
de tantos violadores de alma,
de tantos asesinos de inocencia,
de tantos traficantes de sentimientos,
no puedo seguir intentando mirar el cielo limpio
sin ver los humos que ennegrecen mi mirada,
por tanto pirómano de sueños y deseos,
como poder admirar el horizonte
sin sentir todas esas navajas
que apuñalan nuestra libertad
nuestro derecho de ser “si queremos”
unos humanos sin más meta
que la de amar y ser amados.
Invernare en la cueva de las soledades,
donde solo el frío y el paso del tiempo
podrán abrir azarosas grietas
en mi agonizante espíritu.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues ya sabes, a trabajar el tema. Me ha gustado mucho este poema, por que refleja sin lugar a dudas una aspiración profunda del alma, pero ese es el objetivo, ahora, hay que conquistarlo y mantenerlo. Ese es el Trabajo. Sé que tú puedes, ánimo y adelante. Quien no practica lo que cree que sabe, es que no lo sabe. Salu2 Justo.

Anónimo dijo...

Pues ya sabes, a trabajar el tema. Me ha gustado mucho este poema, por que refleja sin lugar a dudas una aspiración profunda del alma, pero ese es el objetivo, ahora, hay que conquistarlo y mantenerlo. Ese es el Trabajo. Sé que tú puedes, ánimo y adelante. Quien no practica lo que cree que sabe, es que no lo sabe. Salu2 Justo.